“Cuando el reloj marque las doce una estrella del cielo caerá,
Dos dragones negros se posarán sobre mi morada, escupiendo entre su fuego mi dolor y mis derrotas,
Mi habitación se cubrirá de llamas y sangre emanará de las paredes,
El bien y el mal se harán mito ante mi presencia,
En algún lugar del mundo, mi amada sentirá mi ausencia,
Y entonces surgiré de entre las cenizas como el ave fénix,
El mundo girará y se postrará ante mis pies,
Se convertirá en agua y sobre él mi victoria caminará,
Recorreré mi camino con espada en mano, arrancando la cabeza de hipócritas y traidores,
Quienes hablaron de mí a mis espaldas, se tropezarán contra mi pecho,
Justificaré con acciones todo lo que no he hecho,
Porque de hacerme daño, nadie tuvo derecho,
Porque sembré humildad y arrogancia cosecho
Hay cosas que parecen terribles,
Hay cosas horribles que se llevan a acciones,
Hay deseos y miedos reprimidos que sólo pensamientos y palabras,
Hay poemas hermosos y poemas violentos, entre ellos mi canto de venganza, entonado en el viento
Canto de venganza con la muerte que me desearon como voz,
Canto de venganza con lágrimas como melodía,
Con noches de desvelo como violín,
Canto de venganza con sus cabezas sobre el suelo,
Canto de venganza con mi grito retumbando en el cielo”
Cristian Ramírez
OBERTURA 2010
domingo, 17 de octubre de 2010
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